domingo, 30 de marzo de 2008

I will love you


Esta imagen trata sobre una leyenda mexicana y quiero dedicarsela con mucho cariño a Mariana, porque nunca falta el que muere por Amor y a su vez el que lo da TODO por este. (aun que seguro que ya la conocias)

Popocateptl e Iztaccihuatl

Hace ya miles de años, la princesa Iztaccihuatl se enamoro del gentil capitán Popocatepetl. El padre de la princesa dijo al capitán que si volvía un día con la cabeza del cacique enemigo clavada en su lanza encontraría preparados un festín en honor al triunfo y la mano de la princesa Iztaccihuatl. Y Popocatepetl fue a la guerra con la esperanza de que cuando volviera tendría la mano de su amada. Lucho contra las dificultades y tras años de ausencia volvió donde su amada.
Al fin retornó a la tribu con la cabeza del cacique enemigo en su lanza. Hallo el festín en su triunfo preparado, pero no así la mano de su amor. En vez de eso, encontró que su novia dormida bajo el sol, esperaba en su frente el póstumo beso de la boca que nunca en su vida la beso.

En la vida suya, muy suya porque a la muerte se la gano, tenia la riqueza, el poderío, pero no tenía el amor... Entonces hizo que 20 mil esclavos alzaran un gran túmulo bajo el sol, amontono diez cumbres en una escalinata como de fantasía, tomo en sus brazos a su amada, y el mismo sobre el túmulo la recostó, luego encendió una antorcha y, para siempre, se quedó en pie alumbrando el sarcófago de la princesa.

Duerme en paz Iztaccihuatl nunca los tiempos borraran los perfiles de tu expresión.
Vela en paz Popocatepetl nunca los huracanes apagaran la eterna antorcha de tu amor.

2 comentarios:

Mariana Evans dijo...

Ayyyyy muchas gracias por dedicarme la entrada, pues uno necesita mucho en estos trances saber que alguien esta ahi del otro lado, muchas muchas gracias por todas las muestras de apoyo, en realidad lo agradezco más de lo que las palabras lo puedan decir.

Besos y abrazos, oye haber cuando te pasas por el otro blog, osea el personal digo paque veas mis loqueras. jejeje :)

Juan Andrés Vallejos dijo...

Toda cultura tiene historias muy parecidas que solo cambia el prtagonista y el contexto, pero la idea y el mensaje que se quiere dejar es el mismo. Muy bello, saludos :).-